Frente a la emergencia ocasionada por la pandemia del coronavirus COVID-19, profundizamos nuestro apoyo en materia de salud constituyendo un Fondo de Emergencia COVID-19 para acompañar a las comunidades en las que están insertas las organizaciones vinculadas a la Fundación.
En una primera etapa y en función de las necesidades contextualizadas, el aporte se tradujo en equipamiento (laringoscopios, camas de UTI, monitores multiparamétricos, bombas de infusión, carro de paro y cardiodesfibrilador, termómetros, oxímetros, colchones anti escaras, etc.); elementos de protección personal (barbijos, antiparras, máscaras faciales) e insumos (reactivos para tests).
Posteriormente, en una segunda etapa, promovimos la formación de equipos de salud no intensivistas (médicos, enfermeros y kinesiólogos) para colaborar con los médicos intensivistas y ampliar la capacidad de respuesta de las instituciones de salud.